miércoles, 28 de julio de 2010

Las vidas posibles del señor Nadie



"Las vidas posibles del Sr. Nobody" es una película sobre la duda. Pero puede que me equivoque."
Este era el comentario del cachondo de su director, Van Dormael, en una entrevista.
Mr. Nobody es una película inclasificable, sorprendente, impactante. Y, en mi opinión, magistral. Es lo mejor que he visto en los últimos tiempos. Narra la historia de un decrépito ser allá a finales de su vida y a finales de siglo XXI, que trata de recordar su vida a través de varias decisiones trascendentales. La película sigue a trompicones varios hilos posibles de su vida, sin saber si fueron no ciertos o sólo flipaduras soñadas por el abuelo.

Para complicar la trama, el director añade varios flashes sobre teorías del tiempo y del espacio.

Y para terminar de retorcer el aliño, lo adereza con imágenes plásticas de dificil digestión; a veces a modo de onanismo visual , a veces cursi, a veces imcomprensible pero siempre impactante y casi siempre brillante.

Las vidas posibles van alternándose y pisándose unas a otras en un aparente caos.

El papel de Jared Leto es simplemente sensacional. Hasta 16 papeles distintos acaba interpretando haciendonos creíbles cada uno de ellos.

El final, tras 140 minutos de hincar el culo en la butaca, no acaba la película sino que la empieza nuevamente, tras dar una vuelta completa que no ha llevado a ningún sitio. O a todos a la vez.
De todo este pastel, sólo podía salir un truño infumable o una obra maestra. Claramente, cae en esto último y de la mezcla desquiciada de todos estos ingredientes sale un cocido genial. Claro que no todos pensaban esto a la salida del cine. A unos cuantos el ceño se les incrustaba en el flequillo de lo tieso que lo llevaban del disgusto.

Es fantástico que haya quien se atreva a acometer estas historias a sabiendas de que muchos serán los que se les indigesten sus palomitas indignados al no descubrir en los cinco primeros minutos de película al bueno, al feo y al malo (y a la chica). Estamos (estoy) ahítos de engullir historias yanquis planas, unidireccionales, con principio-desarrollo-final (feliz). Que nos dicen que la vida es la sucesión ordenada y con sentido, de los hechos que te ocurren entre que naces y mueres. Triste concepción.

Por suerte, todavía queda quien ve historias con varios planos, con varias verdades al mismo tiempo que se contradicen a sí mismas. En fin, que hay vida más allá de las palomitas.

Esta película no admite términos medios; o te enamora o la odias. En cualquiera de los dos casos, te sentirás un poquito más vivo.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

SABES? ME HACE MORIR DE ENVIDIA QUE PUEDES VER PELÍCULAS COMO ESTA, TRISTEMENTE LOS CINES EN MEXICO EXHIBEN MUY POCAS DE ESTE TIPO, Y O LAS VES EN UN FESTIVAL O SOLO TE QUEDA RENTARLAS.

blas zeta dijo...

Echa un vistazo por internet a ver si la encuentras. Creo que merece la pena.