miércoles, 31 de agosto de 2011

Jornada ajedrez Itaroa


 
 ¿Qué plan se te ocurre para un sábado de domingo de agosto? Ir a una playa atiborrada de suegras y críos horribles con palas y cubos a lucir tu recién estrenada operación de elongación del pene? No, hombre, no; no me jodas. Lo que cualquier persona con dos dedos de frente y tres de páncreas eligiría sin dudarlo es pasarlo jugando al ajedrez todo el día.


Eso es lo que pensamos un grupúsculo de seres malignos y orvinos que el sábado pasado perpetramos la 2º jornada de ajedrez en el centro comercial Itaroa. Por la mañana, el torneo por equipos. Los mejores equipos navarros y algunos de los mejores del resto del mundo se daban cita a las 11 h. para dilucidar el campeón del 26º Torneo Orvina. Las primeras rondas dejaban al Orvina A y a Fomento de Rentería como líderes destacados mientras san juan y orvina b quedaban para el tercer puesto. A la última ronda llegaban empatados los dos primeros. Pero mientras Orvina, con Unai, Mombi y Olaza, hacía un pleno, Fomento perdía su primer encuentro contra el Orvina B, que, con ello, se hacía con el tercer puesto.

Buen torneo e impecable organización bajo la batuta de Adrián e Iñaki. Sí es que somos buenos, qué le vamos a hacer. Los seres inacabados también tuvieron su oportunidad en los torneos infantiles sub-14 y sub-10. En el sub-14 la tiranía de Mikel Ortega no dio opción a nadie y ni unas tristes tablas cedió.

A la tarde tocaba exhibición y eso obligó a regar bien la comida con caldos de la cas, que para dar espectáculo, no hay nada como la desinibición etílica. Entre simuláneas, partidas rápidas, lo que triunfó sin duda fue al ajedrez gigante. Las rápidas con ajedrez gigante son una de las pocas ocasiones en las que se puede ver el corrocho sobaquero de un ajedrecista provocado en acto de servicio. Ni Camacho en sus mejores años. También con las piezas de medio metro, las partidas a la ciega congregaron a un buen número de curiosos que observaron atónitos no sólo cómo se juega sin ver las piezas sino los comentarios de Monje que, a falta de micrófono, narraba a voz en grito el desarrollo de las partidas. Para la historia quedarán sus berridos explicando al atónito público las consecuencias brutales de enrocarse en distintos flancos.

Buena la jornada, tanto los torneos como la exhibición, que nos deja buen sabor de boca. Y para qué nos sirve esto? nos preguntan parejas, familiares y desconocidos al llegar a casa.

dinero? fama? gruppies dispuestas a cualquier cosa por acostarse con un ajedrecista? Pues....no.... ¿entonces? ......pues lo hacemos por.......el ajedrez. Ah,....ya -te  dice tu tío con la misma cara con la que un entomólogo mira a una nueva especie de escarabajo pelotero. ......Pero nos gusta, qué le vamos a hacer.